Con la inmovilidad del lebarol
se queda el granate acumulado
en unos labios
que no quieren besarme
pero me besan.
Me estoy aficionando al agua
que dan en el metro
y pronto me verás volar
por la ciudad
mía
que hiciste tuya
cuando el no beso
se convirtió en todos los besos.
lunes, 13 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
A veces pienso que no se que es mejor.. si unos labios que no quieran besarme y aun asi me besen.. o que unos se mueran por hacerlo y no lo hagan... con todos sus pros y contras, creo que escojo la segunda...
Pues creo que me han pasado ambas... La primera me estaba matando y la segunda nunca llegó!
Antes que nada, MUY FELIZ CUMPLEAÑOS!!! Espero que te la estes pasando de lo lindo, espero que en no mucho nos toque festejar de igual modo.
Con respecto a tu texto y los comentarios, yo igual he vivido ambas experiencias, en definitiva los labios que no desean besar producen un sabor amargo... Coincido con Charlotte.
Bueno pues gracias por lo de las felicidades y los festejos y bueno, qué te puedo decir yo que sea de nuevo?
Por otro lado, tiene tela para cortar eso de los besos!
te doro.aunque no estes siempre estoy desiando tus labios chula
Publicar un comentario